10 consejos para comprar gafas para niños
Si usted es un padre que busca un par de gafas adecuadas para su hijo, lo más probable es que se confunda al entrar a una tienda de artículos ópticos.
No hay escasez en los armazones para niños. El problema es averiguar qué gafas estará dispuesto a utilizar su hijo y si durarán más tiempo del que le toma regresar a casa.
Encuentre aquí 10 consejos de compra para ayudarlo a elegir las gafas que le encantarán a su hijo además serán elegantes y duraderas.
1. ¿Qué tan gruesos deben ser los lentes?
La receta para gafas es lo primero que debe tener en consideración al elegir sus gafas. Antes que comience a buscar armazones, consulte a su oftalmólogo o profesional de la visión sobre los mejores lentes para su hijo.
Si la receta requiere lentes fuertes, los cuales probablemente serán gruesos, evite armazones grandes que aumenten su grosor. Además, los lentes pequeños suelen tener menos aberraciones de orden alto cerca del borde de los lentes a diferencia de los lentes más grandes hechos con el mismo material y receta, por lo que existe un menor riesgo de tener una visión periférica borrosa o distorsionada.
2. Elija armazones con un estilo moderno y atractivo
La mayoría de los niños que utilizan gafas por primera vez son tímidos al respecto. Por lo tanto, elija armazones que tengan un estilo moderno y atractivo. Además, algunas características como los lentes fotocromáticos que se oscurecen de forma automática con la luz del sol al aire libre pueden ayudar a que su hijo desee utilizar gafas.
3. ¿Plástico o metal?
Los armazones para niños están hechos de plástico o metal y muchos tienen estilos que imitan intencionalmente los armazones de gafas unisex diseñados para adultos. Los niños a menudo se sienten atraídos a estos estilos porque los hace ver más adultos. No es inusual que ellos elijan armazones que luzcan como los que utilizan sus hermanos mayores o sus padres.
En el pasado, los armazones de plástico eran una mejor opción para los niños puesto que se consideraban más duraderos, menos propensos a doblarse o romperse, más livianos y menos costosos. Pero ahora, los fabricantes están haciendo armazones de metal que incorporan estas características. La composición del metal varía, así que pregunte al encargado de la óptica cuál es la mejor opción para su hijo, según la experiencia con diferentes aleaciones.
Si su hijo ha mostrado sensibilidad a ciertas sustancias, elija armazones hechos de materiales hipoalergénicos. Por ejemplo, algunas personas son alérgicas a los armazones de metal que contienen níquel.
4. Ajuste apropiado del puente
Una de las cosas más difíciles al elegir armazones adecuados para niños pequeños es que su nariz no está completamente desarrollada, por lo que ésta no tienen un puente para evitar que los armazones de plástico se deslicen hacia abajo. Sin embargo, los armazones de metal por lo general están hechas con almohadillas de nariz ajustables, por lo que se adaptan al puente de todos.
La mayoría de los fabricantes reconocen este inconveniente con los armazones de plástico y hacen que los puentes de sus gafas se adapten a narices pequeñas.
Cada armazón debe evaluarse individualmente para asegurarse que se ajusta al puente. Si existe alguna brecha entre el puente de los armazones y el puente de la nariz, el peso de los lentes hará que las gafas se deslicen, sin importar qué tan bien se ajusten los armazones antes de que se hagan los lentes.
Es importante que las gafas se mantengan en su lugar; de lo contrario, los niños tienden a mirar por encima de ellas en lugar de volver a colocarlas apropiadamente. Un optometrista generalmente es quien puede decidir si un marco se ajusta correctamente.
5. El estilo correcto de las patillas
Las patillas que se envuelven alrededor de la parte posterior de la oreja ayudan a evitar que las gafas se deslicen o se caigan por completo de la cara del niño.
Estas patillas envolventes, llamadas “patillas de cable”, generalmente están disponibles en armazones de metal y son especialmente útiles para mantener las gafas de los niños pequeños en su lugar. Otra opción son los armazones que incluyen una correa elástica para colgarse las gafas alrededor de la cabeza.
6. Bisagras de resorte
Una buena característica para las patillas de sus gafas son las bisagras de resorte. Éstas permiten que las patillas se flexionen hacia afuera o adentro de los armazones, sin causar ningún daño.
Los niños no siempre tienen cuidado cuando se ponen y quitan las gafas, y las bisagras de resorte pueden ayudar a prevenir la necesidad de ajustes frecuentes y reparaciones costosas. También son útiles si el niño se duerme con las gafas puestas o las utiliza mientras juega.
Las bisagras de resorte son muy recomendables para los niños pequeños que a veces se dejan llevar al jugar con sus nuevas gafas.
7. Materiales para los lentes
Una vez que usted y su hijo estén de acuerdo con el tipo de armazones que elegirán, el siguiente paso a considerar son los lentes.
Los lentes de las gafas para niños deberán ser de policarbonato o Trivex. Estos materiales son mucho más resistentes al impacto que otros materiales para lentes y le brindarán mayor seguridad.
Los lentes de policarbonato y Trivex son también mas livianos que los lentes regulares de plástico, lo que hace que las gafas sean más cómodas, en especial para las recetas con mucha graduación.
Asimismo, los lentes de policarbonato y Trivex tienen protección incorporada contra los rayos ultravioleta (UV) potencialmente dañinos, además de recubrimientos resistentes a los rayones, colocados por el fabricante o el laboratorio de fabricación.
El precio de los lentes de policarbonato por lo general es comparable al costo de los lentes de plástico regulares con recubrimientos resistentes a rayones y a los rayos UV. También, con el policarbonato, los niños obtienen un margen adicional de seguridad para proteger sus ojos. Las lentes Trivex pueden costar un poco más que los lentes de policarbonato.
Evite elegir lentes de vidrio para las gafas de los niños. Aunque son muy resistentes a los rayones, los lentes de vidrio son muy pesados y pueden romperse con facilidad (en comparación con los lentes de policarbonato o Trivex).
8. Gafas para deportes
El policarbonato es un material de lentes tan seguro que quizá permita que su hijo practique deportes con sus lentes regulares.
Este es el inconveniente: aunque el policarbonato es el material de lentes que se usa en las gafas deportivas, los armazones de gafas regulares no brindan suficiente protección contra objetos grandes como pelotas o los golpes causados por los codos de otros jugadores.
Entonces, si su hijo practica algún deporte, un par de gafas deportivas adecuadas con lentes de policarbonato proporcionarán la mejor protección contra las lesiones oculares.
Para proporcionar una protección óptima, las gafas deportivas deben colocarse correctamente, así que consulte a un especialista del cuidado de la visión antes de comprarlas. Las aberturas de las lentes de las gafas deportivas deben ser lo suficientemente grandes para que, si las gafas son empujadas hacia la cara, los puntos de impacto estén por encima y por debajo de los ojos y se puedan evitar lesiones oculares.
9. Garantías
Muchos minoristas ópticos ofrecen un plan de garantía que reemplazará las gafas sin cargo o por una pequeña tarifa en caso de daños a los armazones o lentes. Considere optar por la garantía, especialmente si su hijo es un niño pequeño o usa gafas por primera vez.
Verifique los costos de reemplazo de lentes con y sin el plan de garantía. Por lo general, si la garantía le cuesta menos o casi la misma cantidad que la tarifa para reemplazar un solo lente, el precio vale la pena.
Asegúrese de que la garantía de las gafas incluya una provisión de reemplazo si los lentes se rayan mucho debido al uso normal. Además de causar deslumbramiento y visión borrosa, los rasguños en la superficie de los lentes pueden comprometer su resistencia al impacto, poniendo en riesgo los ojos de su hijo.
10. Compre un par de gafas “de respaldo”
Debido a que los niños pueden no tener tanto cuidado con sus gafas, es una buena idea comprarles un segundo par de gafas de respaldo, especialmente si su hijo tiene una graduación alta y no puede estar sin sus gafas.
Pregunte al especialista de la tienda óptica si se aplican descuentos especiales para los segundos pares; a menudo lo hacen si el par de respaldo se compra al mismo tiempo que el par inicial.
En algunos casos, las gafas deportivas se pueden utilizar como un par de gafas de repuesto. O, si la receta de su hijo no ha cambiado de forma significativa, mantenga sus gafas anteriores en un lugar seguro para usarlas como repuesto.
Si su hijo utiliza lentes todo el tiempo, deberá considerar adquirir los lentes fotocromáticos o gafas de sol con graduación para poder disminuir el deslumbramiento, aumentar la comodidad visual y brindar una protección del 100% contra los dañinos rayos UV del sol.
Página publicada en jueves, 1 de agosto de 2019